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Vacunas contra el COVID-19: ¡Solución inminente!

¡Vacunas! Si, lo sé. Llevamos meses consumiendo todo tipo de noticias sobre Vacunas contra el COVID-19 y sus respectivos efectos.

¿Criterios al respecto? ¡Diversos y contrastantes!: positivos y negativos, buenos,  malos, alentadores, alarmantes…

¿A cuál creerles? «esa es la pregunta del millón en estos últimos tiempos». Es por este motivo que hoy te decides a leer un artículo como este, que te permitirá sacar tus propias conclusiones sin influencias de terceros. Solo te ayudará hacerte las preguntas correctas y verdaderamente importantes, y las que sin dudas, en un contexto como este, se imponen responder.

Seamos sinceros: ¿Hace cuánto?

¿Hace cuánto no te aplicas ese creyón de labios que te hace lucir ¡perfecta!? O ¿hace cuánto no luces ese corte en la barba que te hace ver más joven o más guapo ante las chicas? ¿Hace cuánto no te diviertes a lo grande y amaneces en cualquier lugar que no sea tu propia casa?

¡Vale! Entremos en temas «menos superficiales»:

¿Hace cuánto no abrazas a tus compañeros de aula, trabajo o simplemente a esa buena amistad? ¿Hace cuánto estás viendo a tus seres queridos mediante una fría pantalla? ¿Hace cuánto sientes que tu relación sentimental no da para más porque está cayendo en la monotonía? (cuando en realidad no es culpa de ustedes, sino de las limitantes que implica el COVID-19). ¿Hace cuánto te cansaste de vivir con miedos y de no poder salir a la calle de la mano de tus hijos con tranquilidad?

¡NO me respondas a mí! Continúa razonando conmigo y veamos qué tan mala puede ser LA SOLUCIÓN.

LA SOLUCION: pasos para ser aprobada

El desarrollo de una vacuna es un proceso largo y complejo que involucra la participación combinada de organizaciones públicas y privadas. Para su aprobación, deben pasar por varias fases y etapas, las cuales son las que, según pase el tiempo y vaya saliendo un resultado (de preferencia positivo), permitirán validar o no oficialmente su lanzamiento.

Por lo tanto, si me preguntases a mi si: ¿un país sería capaz de poner en riesgo a sus ciudadanos, e incluso a turistas que buscan aplicarse dichas vacunas? Honestamente mi respuesta seria: NO LO CREO.

Considero que actualmente nos encontramos ante una situación mundial crítica que requiere de una respuesta certera por parte de todos nuestros líderes. Por lo tanto, un tema tan serio y peligroso como este, no me cabe dudas que será tratado con el mayor cuidado posible.

¡Ah! ¿Que siempre existirán oportunistas que intentarán aprovecharse de esta situación? Sí, es muy cierto, pero es justamente ahí donde interviene tu inteligencia y raciocinio, que te permitirán discernir entre: lo qué es correcto y lo qué NO lo es tanto.

Miami: Una vía efectiva

Este es un ejemplo de una decisión correcta:

En Miami, Estados Unidos, la vacunación contra la COVID-19 está habilitada también para los no residentes de los EE.UU desde el 29 de abril último, o sea, que incluso el turista puede salir beneficiado con ella.

En el caso de la vacuna de Pfizer, se administra a mayores de 12 años, mientras que las vacunas de Moderna y Johnson & Johnson son a partir de los 18 años de edad. Esta última requiere una sola dosis, lo cual es más conveniente para los visitantes que viajan por poco tiempo a la zona turística.

Por lo tanto, querido lector, creo que ya estamos listos para responder a la pregunta del otro millón: 

¿Qué tan perjudicial puede ser la vacuna que elimine el «hace cuánto»?

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Las Bahamas: secretos al descubierto

Si comenzaste a leer el artículo, solo te daré estos consejos: Agarra a tu mente abierta, ármate de adrenalina, empaca 5 paquetes de sueños e ingiere varias píldoras de emoción, que tendremos un gran viaje por delante: ¡Directo a Las Bahamas!

¡Ven!, te invito a Las Bahamas.

¿Eres de l@s que le impactan ese tipo de películas que comienzan con una escena intrigante, y  que de a poco van mezclando el romanticismo con lo rústico, obteniendo un resultado exótico con matiz sublime y folclórico?

Pues querid@ lector, te advierto, esta no es un peli, estás son Las Bahamas, conformada por más de 700 islas, de las cuales solo 24 se encuentran actualmente habitadas. Y no sería descabellado imaginar que algunas de ellas ya han sido compradas por unos cuantos millones, convirtiéndose en refugio de algunos famosos y millonarios. ¡Las cosas como son! «El que puede, puede».

¿Corsarios y Piratas? Pues sí, no me ido del tema, continúo en las Bahamas. Resulta que muchas de sus islas se llegaron a convertir durante 1706 y 1718 en el escondite predilecto de estos forasteros, convirtiéndose en la actualidad en uno de los tantos motivos por los cuales se visita la isla Nassau, capital y centro comercial y cultural del archipiélago.

¿El mejor aliado para el viaje? ¡El crucero!

Como recomendación, en caso de contar con muy poco tiempo para disfrutar de las Bahamas, si de transporte se trata, elige la opción del Crucero. ¿Por qué? Sencillo:

No tienes que preocuparte por buscar restaurantes durante el viaje, ni hoteles, ni medios de transporte, además, con él ya tienes garantizado el confort y gran parte de la diversión que te espera en tu destino final. En resumen: ¡Un crucero es lo mejor!

Eso sí, no te puedo engañar. Muchas veces, por una misma oferta en cuanto a viajes por crucero, suelen encontrarse precios que pueden sorprenderte «para bien y para mal». Por ese motivo, siempre voy «directo al grano» con mi buscador favorito, optando por ofertas que no excedan de $700 y que me incluyan un beneficio extra, de lo contrario, honestamente… no suelo aplicar. 

A lo que vamos: ¡a turistear!

Una vez hayas arribado, recuerda: ¡no te limites! Opciones existen miles: Nassau, Isla Paraiso, Freeport, Gran Exuma, Isla Harbour, Long Island, Treassure Cay, Isla del Gato, Bimini, Governor’s Harbour, UFFF… ¡se los dije!, para el viaje se necesita energía.

Por lo demás, no te preocupes, ¡escucha a tus necesidades!: calor, ansiedad, aburrimiento, apetito… ellos solos te llevarán a donde necesites. Y todo lo tienes ahí, en Las Bahamas.